La esfera de la discriminación
El director Italiano Roberto Minervini regresa con su nueva cinta documental ¿Qué harás cuando el mundo esté en llamas? USA, (2019). En la que espejea las tenciones históricas, sociales y políticas que enfrenta la sociedad Norteamericana en términos de segregación racial; y como se traduce actualmente en un clima hostil para la comunidad afroamericana.
Desde el título del film Minervine, cuestiona nuestra postura ante el fenómeno de la discriminación. Sabedor del poder del cine como reflejo y catalizador social, emplea una triada de historias íntimas que entretejen la cotidianidad de una parte de la sociedad Estadounidense que históricamente ha sido víctima de la discriminación y la opresión sistémica: Ronaldo King y Titus Turnerdos dos hermanos sostenidos por una madre soltera que hace lo que puede, temerosa de que su hijo siga los pasos de su padre; Judy Hill, la encargada de un bar histórica al borde de la quiebra y de perder su propiedad; y por último el nuevo partido del emblemático grupo de las Panteras Negras, quienes preparan una protesta a gran escala contra la brutalidad policial.
Como punto de partida para el desarrollo de las historias dentro de la cinta, el director recoge como referencia una serie de brutales asesinatos policiales de jóvenes afroamericanos durante el verano de 2017, los cuales provocan conmociones en todo el país. Este acontecimiento entrelaza de cierta forma los presentes y pasados de los protagonistas que vemos resistir desde su trinchera los efectos del racismo.
La filmografía de Minervine sigue refrendándose como una obra de profundo rigor narrativo. En ¿Qué harás cuando el mundo esté en llamas? La premisa es contundente: La exclusión y segregación siguen prevaleciendo en la sociedad norteamerica, y aún más, parece encontrar un nuevo impulso en el discurso político y gubernamental de este país, especialmente al sur del territorio donde históricamente ha prevalecido una fuerte tendencia a la discriminación racial.
La habilidad del director para mostrar estas condiciones, radica en la forma de conducir las historias. Al emplear un tono intimista, hasta cierto punto natural, con las implicaciones que conlleva el registro con una cámara. La cinta prescinde de la contextualización geográfica, pues el espectador comprende con el correr de los minutos que puede tratarse de cualquier ciudad al sur de EUA, lo que refuerza el argumento central: Los sentimientos soterrados de odio que aún prevalecen en la espina dorsal de este país. Siendo así que el retrato cercano de los personajes nos habla más de las implicaciones del racismo en sus vidas cotidianas que un ejercicio antropológico presente en otros trabajos documentales que abordan esta problemática.
En opacos y al mismo tiempo luminosos tonos negros y blancos la historia del director Italiano, logra narrar con empatía una historia que invita a la catarsis y a la crítica de un sistema de valores e ideas respaldadas por intereses históricos y políticos que fomentan la segregación y la violencia sobre grupos que han padecido explotación y a los que se les ha negado derechos y garantías indispensables. Minervine cuenta una historia de resistencia ante la opresión hegemónica.
