(Pocos) Modos de ver

A partir del libro de Berger, “Modos de ver”, la exhibición reúne alrededor del concepto de desarticulación una mirada vacía y publicitaria del arte. Curada por Tatiana Cuevas, la muestra presenta una museografía deficiente. La iluminación no ayuda a las obras. La colocación de los textos no permite un sentido de lectura coherente y los detalles técnicos junto al espacio confunden, de por sí, al observador.

El recorrido comienza con Yolanda Ceballos (Monterrey, 1985). En Teoría de la transición: destrucción, Teoría de la transición: habitación y Teoría de la transición: reconstrucción, la pérdida de la memoria y la destrucción se significa con el cambio inmobiliario en Monterrey. Nada te permite tener una reflexión con sus medios, sea la fotografía, la instalación o la escultura.

Maquinaria para polímeros y Máquina verde, Victoria Estrada (Ciudad de México, 1989), habla de la reconstrucción de la memoria colectiva e histórica, pero sólo en el texto. Los dibujos son apuntes sin un fin, la plataforma y el video un cuerpo desmembrado ante una idea que podría ser una crítica sincera pero termina triturada como los pedazos del suelo que pisas y olvidas.

En un tríptico visual, Idolatría y hechicería, de Antonio Monroy (Toluca, 1984), una comunidad en el Estado de México representa a la cultura indígena viva  en contraposición a la cultura de la modernidad en sus excesos y explotación. Es una protesta política por el control del agua de la zona que utilizamos en la ciudad. La pieza demuestra que el videoarte es una herramienta para expandir y cuestionar el entorno.

Pero lo que aparece como una muestra de cultura viva, se convierte en apropiación cultural. Lorena Ancona (Chetumal, 1981) con Yu um lu’um, yu um ka’ an. Gran tierra, gran silencio (serpiente) pretende dar cuenta de la riqueza de Yucatán. Lo políticamente correcto se transforma en deficiencia artística.

Por su parte, Bayrol Jiménez (Oaxaca, 1984) realizó Escritura mancha, Secuencias donde se busca desarticular la forma tradicional del dibujo. Un buen intento pero con un resultado indiferente.

Pablo Tut (Campeche, 1992) con Lícito lúcido  logra una obra inteligente. Es el regreso a la mirada del espectador en el discurso artístico. En un cuarto blanco, ves que “la belleza está en el ojo de quien la mira”. Es un metatexto a la idea de arte; el lenguaje como visión con sentido. En Mirador metafísico Infonavit aborda lo social a través del video . El trabajo demuestra que el proyecto mexicano moderno es una estructura sin contenido.

Inestimable de Cecilia Barreto (Ciudad de México, 1985) es una instalación sobre el almacenamiento informático de alta seguridad. No supe bien qué es lo que colgaba de las paredes, pero parecían pinturas. Al final es un espacio vacío que no aporta nada.

Y Amauta García (Puebla,1983), con Sueño de casa, El Pedregal, Palo Alto y San Ángel aborda la sociedad de consumo y el problema de la vivienda. Las esculturas son un juego entre instalación y lenguaje escultórico. La pieza es relevante por el contexto inmobiliario tras el terremoto del 19-S.


MODOS DE VER
Museo de Arte Carrillo Gil
Programa BBVA-MACG 5ta edición
26 de enero- 29 de abril de 2018

Etiquetas de la nota
, ,
Escrito por
Más de Alonso Ruiz

El amor más allá de las fronteras

Guerra Fría (2018). Es el tiempo del cine mexicano. Del Toro, Iñarritu...
Leer más

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.