No se si han escuchado hablar sobre este hermoso proyecto, hoy ahondaremos en el concepto de “Tiny Desk Concert”, un escenario “mainstream” muy a su manera, que de a poco ya es de gran importancia y, creo, en gran medida a la frescura y autenticidad con que nos presentan la música y cada proyecto que hace de oficinista por un día para ocupar un escritorio a su manera.
La música, como cada una de las expresiones artísticas, trata de provocar algo en su espectador, lo que sea, tocar fibras lo suficientemente profundas como para que ese pequeño momento en que fuiste provocado quede para siempre en el consciente íntimo de cada uno de nosotros, los conciertos de Tiny Desk es una cascada de este tipo de momentos que esperan salpicarnos en cualquier momento.
El primer Tiny Desk Concert se produjo en 2008, después de que Bob Boilen y el editor de NPR Music, Stephen Thompson, salieron de un bar, frustrados por no poder escuchar la música por el ruido de la multitud, cosa que nos frusta a todos. Thompson dijo en broma que el músico, la cantante Laura Gibson, debería presentarse en el escritorio de Boilen. Un mes después, Boilen hizo los arreglos para que ella hiciera exactamente eso, la grabó de manera muy improvisada y publicó en línea.
Así, pues, me ánimo a presentarles algunos de mis favoritos, los que han quedado en ese consiente íntimo y solo algunos de los artistas dotados y generosos que pasaron e hicieron que el mundo se sintiera más grande, más amable, más abierto.
Amadou & Mariam. Amadou Bagayoko y Mariam Doumbia se conocieron cuando eran niños en el Instituto para Jóvenes Ciegos en Mali. Después se casaron y siguen disfrutando de una carrera que abarca cuatro décadas, ocho álbumes y la música más alegre del mundo.
Mac Miller. Este concierto estaba destinado a ser un punto de inflexión: la primera vez que interpretaba canciones del nuevo álbum “Swimming”. Lo podemos ver maravillosamente bondadoso y reflexivo, con un carisma inimaginable. Lamentablemente, esta sería una de sus últimas presentaciones: falleció poco más de un mes después a los 26 años.
Bernie & The Believers feat. Essence. Nunca había encontrado una historia como esta. Después de perder su voz ante la Esclerosis, Bernie Dalton participó en el Tiny Desk, con la ayuda de su profesora de voz, Essence Goldman, quien interpreta sus composiciones mientras Bernie observa en un monitor desde su cama del hospital. Es un concierto extraordinario, que captura tanto un gesto de amor como un sueño realizado.
Tank And The Bangas. Esta banda combina el R&B con la poesía, hip-hop y la narrativa resultando en una montaña rusa con un estilo y magia que solo podría venir de Nueva Orleans. Su música e interpretación nos muestran la profundidad de su lirismo y la versatilidad de sus interpretes. En un momento, el funk lleno de diversión, el siguiente jazz relajado, el blues impulsado por el ritmo, y todo fluye a la perfección.
