Del olvido a Hilma af Klint II

Arqueología e historia del arte abstracto

II.
Autores que me precedieron, han hecho nada más que lo justo, nombrarla, hablar de sus obras y de sus exposiciones curatoriales en el siglo XXI.

Alex Vicente en su columna sobre Cultura del periódico El País, expresa: “En sus últimas voluntades, solicitó que no fueran expuestos hasta veinte años después de su muerte, acontecida en 1944 a los 81 años. Tenía la convicción de que el mundo no estaba preparado para observar su obra, tal vez porque se enfrentó a la incomprensión de los que la rodeaban”, explica la comisaria Iris Müller-Westermann.

Aunque si bien es cierto, no se trata de injusticia acerca del silencio en torno a Af Klint, sino más bien, el silencio que ella prefirió guardar póstumamente por un par de décadas. Ella, Klint, decidió como menciona Iris Müller, que su obra tras su fallecimiento fuese embalada en una bodega familiar por veinte años, porque creyó que el mundo no estaba preparado para acercarse, admirar y ver sus obras. Ella, así lo creyó, así sucedió.

Hilma af Klint
Izq. – The Mahatmas Present Standing Point, Series II, No. 2 a, (1920) – Der. – The Standpoints of Judaism and Heathendom, No. 3 b, (1920).

En esta ventana de tiempo, Kandinsky y su devenir lo convirtieron en el padre del arte abstracto moderno siendo muy reconocido por ello. No obstante, él mismo se proclamó como tal en 1911 y efectivamente en ese momento lo fue. Por tanto, no me parece incomodo que Hilma af Klint sea la madre y pionera del arte abstracto esotérico premoderno, como me permito definirla.

Sin lugar a duda, Alex Vicente nos dice que es la inventora de la abstracción. En este sentido, su vida académica comienza de manera relevante. Ella perteneció a la primera generación de mujeres que estudiaron arte en 1887 en la Real Academia Sueca de las Artes, ella asistió de 1882 a 1887. Rompiendo moldes y construyendo nuevos arquetipos. Mujer inalcanzable y única.

Hilma af Klint

Es en el año de 1896 y a partir de aquí, que Af Klint se acerca a doctrinas espiritistas y ocultistas. Marco Posi de la Universidad de Amsterdam menciona “[…] para Af Klint hubo una experiencia subjetiva mucho más traumática: el convencimiento de entrar en contacto con maestros espirituales incorpóreos y de recibir mensajes de ellos. La diferencia entre los libros y conocer a los maestros ya muestra lo difícil que es generalizar sobre la relación entre esoterismo y arte moderno.” Es decir, era médium y recibía mensajes de seres espirituales, impactando en la forma de su contenido pictórico a lo largo de su vida y sobretodo posteriormente.

Pero, ¿por qué Hilma af Klint es tan importante para el devenir ontológico del arte abstracto?… Simple. No nada más fue pintora y precursora de un movimiento de suma originalidad, ella fue una médium también.

En otras palabras, se acercó y se adentró en un mundo dentro de este mundo. Y desde ahí creó, mentalizó y materializó toda su obra más significativa.

Efectivamente, Pinturas para el templo, fue creado bajo experiencias y directrices de entes extracorpóreos superiores, de 1906 a 1915. Gracias a su diario personal y varios cuadernos de notas, es que todos estos son en conjunto fuente esencial de información para entender el modo en el que la artista creaba y extendía su propio trabajo artístico.

Sin lugar a duda, la figura femenina de Af Klint, es justo lo que al arte abstracto le faltaba para dar forma a este gran constructo y de alguna manera, el ser ella misma conducto o médium, podemos admirar de maneras distintas todas y cada una de sus obras.

Hilma af Klint
Svanen, (1914).

Ya sea que estemos de frente a su obra abstracta como “The Mahatmas present standing point series II, No. 2ª”, o ante obras expresionistas tales como, mis piezas favoritas, “Svanen” 1914 y “The Swan No. 17” 1914-1915 o ante sus obras del simbolismo como “What a human being is” de 1910, es sin lugar a duda que vemos plasmada más que imaginación, plasmó ontologías espirituales desde el esoterismo teosófico.

Parte 3

What a human being is, 1910. wikiart.org

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