Oleaje visual, composición exacta donde trasnocha la abnegación tonal, ahí, el rumor de un par de ojos trae consigo un cantar, una alabanza en la sinuosidad del agua. El espejo fiel, ventanas del alma que durante el parpadeo, acechan para atrapar ágilmente la cromaticidad de las emociones, un arcoíris que cambia cada temporada, con los años. El artista, único genio – mago – con la habilidad de poseer las expresiones, fijarlas al cuadro en el sueño de tinta muerta y aún inerme las convierte en una vivencia, anónima, sin embargo semejante a quien la mira.
Artista, creador del secreto a media luz. Genera épocas al retratar los designios del Estigia, colores, bálsamos para la muerte tardía. En las acuosas florescencias hay torbellinos – imaginerías, recuerdos, dolencias a medio beber, madrigales descabezados, bellos, inquietudes que todavía buscan salir a flote – los delicados roces del color enmarcan la interioridad antigua, la presente y una profecía sutil se deja ver en las apartadas líneas, el artista ha completado la frágil noción del futuro.
Epístola visual que relata las afrentas personales, el ensalmo de los indvidualistas, la cantata general, la que vivimos todos desde las profundidades del ensimismamiento, donde cada quien le da el tono justo – o culpable – que merecemos en lo transitoriedad de la propia vida. Date cuenta, el artista ha dejado silencios sin cortar, agua dormida, paisajes de cristal. Reta al espectador a descubrir historias ficticias en el vuelo de una mirada. Signos, lenguaje que destila el pigmento de los días, un idioma que fue creado para ojos ávidos de sed imantada.
La obra de Carlos Vargas Pons resuelve el enigma de la luminosidad y a su vez esconde una ejemplificación natural de las formas, homenaje intenso donde convoca la ensoñación, podemos sumergirnos sin duda alguna en el Paso de la Laguna Estigia II y luego de pasear por la húmeda hondonada pictórica, la respiración de los sentidos no será jamás la misma, la mirada habrá vuelto a nacer.
Carlos Vargas Pons. (Guadalajara, Jalisco, 1968). Realizó estudios de historia del arte, pintura y dibujo, en su ciudad natal, bajo la tutela de Enrique Ruiz Rojo, José Fors, Davis Birks y Gonn Mosny. Ha presentado muestras individuales en importantes espacios como el Museo Carrillo Gil, la Pinacoteca de Nuevo León, El Instituto Cabañas, El Museo de Arte de Zapopan, la Galería Arte Actual Mexicano, la Galería Haus der Kunst, la Galería de Arte Mexicano, la Galería Thomas Cohn y el Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara.
En las ediciones 1990 y 1991 del Encuentro Nacional de Arte Joven, obtiene el primer premio de adquisición y entre otros premios nacionales es distinguido, en 2005 y de nuevo en 2015, con la Beca Creadores con Trayectoria del FONCA.
Ha participado en muestras colectivas en los principales museos de México y en países como España, Rumania, EUA, Francia, Austria, Eslovenia, Checoslovaquia y Suiza. Su obra forma parte de las colecciones permanentes del Museo de las Artes de Guadalajara, el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey, el Museo de Arte Contemporáneo de Aguascalientes, el Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y el Instituto Cultural Cabañas. Es miembro del Sistema Nacional de Creadores.
