La protohistoria de Theatre of tragedy

La extinta Theatre of tragedy es una de las bandas musicales de la escena gótica más icónicas: su nombre permanece vivo en la memoria y en el gusto de una generación de amantes y aficionados del gothic y del doom metal, subgéneros en los que la banda se movió con amplia solvencia y por los que son más recordados, si bien incursionaron en otros ámbitos musicales en un afán de renovar la estética de su música y sus letras.

Y es que hablar de Theatre of tragedy es hablar de una historia evolutiva tanto en lo musical, como el en lo lírico y conceptual que duró 17 años y produjo una considerable cantidad de material en diversos registros que llegan hasta, durante su momento más duramente criticado y cuestionado, un desenfadado synth pop. Con todo, no puede dejarse de entender la capacidad creativa de esta banda para afrontar con éxito diversos discursos poético-musicales, para reinventarse y seguir manteniendo la calidad interpretativa que les ganó el respeto de la crítica especializada y de la industria musical, así como, a la postre, el apoyo y cariño de millones de admiradores alrededor del mundo.

Formada oficialmente en Stavanger, Noruega, en 1993, se puede afirmar que Theatre of tragedy es la maduración de un proyecto musical ya medianamente armando por los guitarristas Pål Bjåstad y Tommy Lindahl y el vocalista Raymond István Rohonyi, bajo el nombre de Suffering grief, a quienes se sumaría el baterista Hein Frode Hansen después de abandonar la banda en la que trabajaba (Phobia). Al momento de componer su primera canción “Lament of the perishing roses”, la banda cambia su nombre temporalmente a Le Reine Noir y poco tiempo después a Theater of tragedy, nombre con el que se quedará para siempre. Es entonces que Liv Kristine, la vocalista que se volverá uno de los elementos fuertes de la banda, y a la larga un ícono en sí mismo, es invitaba para acompañar con su voz a Raymond István Rohonyi en algunas piezas. Pero, sin duda por la belleza de su voz y su calidad interpretativa, la banda decide incluirla permanentemente en su proyecto.

En 1993 sale el demo de la banda, parte del cual se grabó en Alemania, con 5 canciones, en el que se incluye lo que sería su primer éxito: “A Hamlet for a Slothful Vassal”, tema inspirado, desde luego, en Shakespeare, y posteriormente reeditado en su primer álbum de estudio al año siguiente. Las influencias alemanas de Istvan son notorias, principalmente en la canción “Der Tanz der Schatten”.

Este demo, que deja ya entrever algo de que será la futura banda, consigna claramente la búsqueda de un concepto propio, pues no se percibe una clara una unidad estilística entre las canciones que lo componen. Son notables sus influencias del Doom/Death Metal nórdico, el cual versionan intentando imprimirle su propia marca, la cual sólo es evidente en “A Hamlet for a Slothful Vassal”.

En general, el sonido de la banda es en algún modo primitivo: no ha salido de su protohistoria.

Parte 2 >

Etiquetas de la nota
,
Más de Aleqs Garrigóz

Los otros nocturnos de nostalgia de la muerte

“Otros nocturnos” es la segunda sección de libro Nostalgia de la muerte...
Leer más