Erotismo
Llamar la atención de alguien puede ser muy sencillo, basta con colocar algo que atraiga sus sentidos, que despierte un interés básico, instintivo, animal, como comida o sexo y seguro que la mirada de alguien ya estará posada sobre la idea que se esté ofreciendo.
El trabajo dentro de la industria del entretenimiento en ocasiones radica en hacer que esa atención no se muestre de manera tan evidente sino en agregar algún elemento estético a esa idea. Es decir, vamos a hacer que una escena donde la gente aparece desnuda no sea una simple toma vacía sino que se cuida la luz, los ángulos, lo que se quiere mostrar ocultando un poco para que el público siga expectante, un coqueteo que existe entre la idea sexual y el espectador quien queda atrapado por el recurso y continua con la serie o película esperando poder ver un poco más de ello. El uso del erotismo ayuda a la obra de manera sensorial y estética.
Por una parte, muchas de estas escenas son adicionales en los programas que vemos en televisión, podrían no durar tanto tiempo porque muchas veces, con el preludio a lo que ocurre, con simples miradas entre los personajes principales o con diálogos que anuncian lo que pasará, sería posible prescindir incluso de la grabación de las escenas, sin embargo son estas las que hacen que las personas se queden atrapadas viendo lo que ocurre, despertando esas sensaciones que se relacionan más con las emociones que con las ideas o análisis de la misma obra en cuestión.
Ver un beso o no verlo no nos ayuda a saber si se besaron cuando sabemos que lo hicieron porque previamente mencionan que lo van a hacer, incluso cuando no viene anunciado, cuando se roban un beso puede no tener mucho aporte a la historia quedándonos viendo cinco minutos más como se besan y comienzan a quitarse la ropa, todo eso lo entendemos por la misma narrativa del programa, pero verlo nos provoca emociones no descritas, nos atrae y nos captura en ese punto que no requiere de un análisis a la historia y su forma de ser contada sino de la interpretación que le demos a los actos dentro de la historia por cómo los experimentamos.
Pensando en lo correspondiente a lo estético, sí, quizás nos anuncian algo y lo vemos representado sin justificarse dentro del argumento de la historia, pero su excusa está en la forma en como apreciamos la escena, un conjunto de elementos que nos pueden hacer recordar la película específicamente por esa imagen donde cautivados observamos el cuerpo de alguien sin ropa, sintiendo una combinación de emociones que nos absorben abarcándonos en nuestra manera primitiva de sentir el mundo y nuestra manera emocional de apreciar los matices entre lo bello y lo horrible.
Así, esta parte erótica (quizás mal denominada) tendría un alcance más amplio que sólo lo sexual, por ejemplo Anticristo de Lars Von Trier donde se aprecian varia escenas sexuales que despiertan el interés por lo que está ocurriendo pero que causan emociones como la repulsión o el goce gracias a la forma en cómo se representan esas ideas, algo muy cuidado, algo que se detiene en el tiempo para que quienes observamos apreciemos la forma y el contenido cual manifestación artística que es.
