Exposición de trabajos de gran formato de los autores Juan Carlos Macías y Víctor Hugo Pérez que tuvo su inauguración el día 15 de marzo en el MUSA (Museo de Arte de la Universidad de Guadalajara) y permanecerá hasta el 17 de junio, inauguración que estuvo marcada por múltiples interpretaciones, e impresiones. Puedes amar u odiar las obras expuestas en el recinto, pero no puedes quedarte en el intermedio, es decir, en la interpretación de Hembras no se aceptan medias tintas, los autores se encargaron de que así fuera, ya que los modelos de mujer/hembra que presentan son deformaciones del ideal, no estás en presencia del modelo femenino, ni de la visión tradicional de la mujer, lo que sucede es que te enfrentas, como dijo Carmen Villoro en el conversatorio previo a la inauguración, a facetas de lo femenino que no son las políticamente correctas, te enfrentas a la mujer siniestra y fea, la mujer que asusta. La idea latente en las 39 obras que componen la exposición es la de la mujer-hembra que se muestra oscura, siniestra, que es el cuerpo que el otro teme.
La desnudes es una condición natural, uno se enfrenta a la sociedad cuando se ve desnudo ante el espejo, las mujeres representadas en las obras de los artistas obligan a que nos enfrentemos a nosotros mismos, nos obligan a resignificar la idea del cuerpo y lo femenino, nos encontramos ante la mujer-hembra que enseña y se retrae al mismo tiempo.
Es cierto que las 39 obras en su conjunto resultarán ser muy pesadas, el manejo de los trazos y las tonalidades parecerá un tanto monótonos y con pocas variaciones lo que puede resultar en un tedio después de haber recorrido las 39 piezas que integran la exposición, sin embargo no cabe duda que los artistas lograron plasmar su propia visión de lo femenino desde su raíz natural, es decir, su carácter de hembra.